- Cooliflowerenses, AVISO tipo telefilm, por mucha broma que se incluya, la mayor parte de lo que aquí se cuenta es real -
¿Se puede reciclar el karma? Conforme a la obra de los monjes budistas de Wat Pa Maha Chedi Kaew, sí. Un millón y medio de botellas, el símbolo de un millón y medio de quebrantamientos del precepto budista de no tomar alcohol, les han servido para construir un templo. “El cuerpo es un templo”, dicen los mormones, “Nuestro templo es la cerveza”, podrían añadir tanto los monjes como los participantes del festival Okteberfest.
Al noreste de Tailandia se ha erigido Wat Lan Kuad (El templo del millón de botellas), sólo el principio de un “pelotazo urbanístico” (¡chiste!). Los monjes le han cogido el gustillo a esto del reciclaje y han declarado “Cuantas más botellas consigamos, más edificios construiremos”. Algunos aldeanos de nariz colorada están dispuestos a darlo todo por la causa.“Efffmmmffh”, ha declarado el mayor benefactor, depués de beberse su donación número 48.
Siendo moderadamente serios, reconocemos que es una iniciativa ecológicamente sostenible, filosóficamente redentora, arquitectónicamente revolucionaria, publicitariamente rentable, espiritualmente reciclable… Sí, todo esto es verdad, pero -¡Venga, tú también lo piensas!- nos sigue quedando la misma duda: ¿Cómo se decide uno a construir un templo con botellas de cerveza, sin haberlas bebido previamente? Lo pensaré. Me voy a tomar una cerv… digo, a meditar.
Pincha aquí para ver un reportaje con fotografías grandotas (¡merece la pena!)
ammmmmmmmmmmmmmmmmi me parece muy bueno el post.
[...] Cooliflowerenses, si esto se hiciese realidad las centrales solares abarcarían cientos de miles de kilómetros, circularíamos sobre placas solares con la la posibilidad de cargar vehículos eléctricos con energía fresca, recibida diréctamente del ex-afalto. El CO2 sería una preocupación menor y los monjes budistas ampliarían su negocio. [...]